El adulto es una mariposa de color blanco satinado y con reflejos nacarados que alcanza los 3 centímetros de envergadura. Las larvas recién nacidas son de color amarillento, virando a verde brillante a medida que crecen y alcanzando aproximadamente 2 centímetros de longitud en su máximo desarrollo.
Los daños son producidos por sus larvas, estas se alimentan de brotes terminales, en los que generan una seda donde se refugian. Los daños en plantaciones adultas son de poca importancia, debe producirse un ataque muy fuerte, pero sí pueden tener incidencia en plantaciones de menos de 5 años, provocando un retraso del crecimiento.
El aumento de población suele producirse en primavera-verano y en menor medida en otoño. Se dan varias generaciones solapadas, favoreciendo su desarrollo las temperaturas cálidas y un mayor crecimiento vegetativo. Las materias activas autorizadas en el Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación: